En la tarde del martes 27 de agosto, el Ministro General continuó la presentación de su informe. Destacó los acontecimientos estructurales que han caracterizado la historia de la Orden en los últimos años, especialmente los relativos a la unificación de las Provincias, la supresión de algunas Circunscripciones y el nacimiento de otras nuevas. Estos pasajes afectaron particularmente a las Circunscripciones europeas.
A modo de ejemplo no exhaustivo: la Provincia de Italia Central nació de la unificación de las Provincias de Abruzos, Roma y Umbría; la Provincia de Campania-Basilicata nació de la unión de las Provincias de Salerno y Nápoles y la Provincia de Sicilia nació de la unificación de las Provincias de Messina, Palermo y Siracusa. Además, se suprimieron algunas Circunscripciones y se crearon nuevas entidades, por ejemplo: Holanda y Bélgica pasaron a ser Delegaciones de la Provincia de Alemania; Gran Bretaña se conformó como Delegación de la Provincia de Irlanda o, más recientemente, la Custodia de Japón pasó a ser Delegación de la Provincia de Nueva York. La transformación también afectó a nuestra presencia en Austria y Tirol del Sur.
Un desarrollo similar afectó a las Conferencias: CONCAM y CCA fueron suprimidas en favor de la creación de la CCH; las Conferencias Europeas CECOC, CIC, CIMPCAP, CENOC y ASMEN se han agrupado en la CEMCap y en la CENEC; la Custodia de Arabia y la Custodia de Pakistán se integraron a la Conferencia Asia Pacífico (PACC). Otras Circunscripciones (Custodias) han pasado de la responsabilidad directa del Ministro Provincial a una Provincia.Pasando al aspecto económico, el Ministro General ofreció un sencillo panorama, hablando de los desafíos existentes y dejando que el Ecónomo General exponga luego el detalle en el informe económico. Subrayando en su relación el valor de la providencia, el Ministro recordó la exhortación de San Francisco: “queremos y debemos vivir del trabajo de nuestras manos y, sólo si nos faltan los medios, recurrir a la limosna“.
En conclusión, mirando hacia adelante, el hermano Roberto escribe: “Queremos inspirarnos en Él, seguros de que nuestro testimonio será fructífero si nos ayudamos unos a otros a vivir mejor la expresión fraterna de nuestra identidad carismática. Nuestros hermanos, el tiempo, las situaciones que vivimos, las alegrías y los cansancios que experimentamos, la fidelidad que buscamos y la incoherencia que nos distingue, todo esto es lo que nos es dado hoy y lo que nos corresponde para seguir a Jesucristo y su Evangelio, nada más.” No faltaron los agradecimientos del Ministro General: al Señor, y a los hermanos, reconociendo que el Ministro de una Orden grande como la nuestra poco podría hacer si no contara con la colaboración de muchos hermanos, empezando por la fraternidad de la Curia general, rica y variada. Otro motivo de gratitud es el don de los hermanos Santos y Beatos.