En la mañana del 26 de agosto comenzaron oficialmente los trabajos del Capítulo General 2024, desarrollando el programa establecido en su momento por el Consejo General, en la preparación del mismo. Es decir: la celebración eucarística, la invocación del Espíritu Santo y la procesión hacia el aula magna donde el Ministro General anunció oficialmente la apertura del 86º Capítulo General.
La celebración eucarística, transmitida por el canal de YouTube del Capítulo, fue presidida por Mons. Paolo Martinelli, Vicario Apostólico de Arabia del Sur, y concelebrada por el Ministro General, fr. Roberto Genuin, por el Vicario general, fr. José Ángel Torres Rivera y por todos los Consejeros Generales. En su amplia y rica homilía, monseñor Paolo, subrayando la importancia del Capítulo General como “signo e instrumento de unidad y solidaridad” de la Orden, llamó a los frailes “a la unidad que nos hace ante todo mendigos del Espíritu Santo”. Citando al Papa Francisco, que califica nuestro tiempo como “un cambio de época y no sólo una época de cambios“, Martinelli instó a los capitulares a “afrontar la realidad tal como se presenta, nos guste o no“. Luego agregó: “los tiempos cambian y hay que reconocer que muchas veces no sabemos insertarnos en los nuevos escenarios; podemos soñar con las cebollas de Egipto, olvidando que la Tierra Prometida está delante, no detrás, y en esta nostalgia de tiempos pasados nos petrificamos, nos momificamos. No es algo bueno”. Asimismo, citando nuevamente al Papa Francisco, advirtió contra la búsqueda de los cambios como camino para consentir a las modas del momento, arriesgándonos a la mundanidad: la Iglesia “es joven cuando es ella misma. Es joven cuando es capaz de regresar continuamente a su fuente“. Luego reconoció la importancia de la atención sobre la evangelización de las culturas y la inculturación del Evangelio y del carisma (y esto es lo que hacemos), pero más específicamente recordó la necesidad de promover la interculturalidad del Evangelio y del carisma.
Inspirándose en su experiencia como Obispo en el contexto multicultural de Arabia, Mons. Paolo concluyó su homilía recordando a los frailes que “la vida religiosa y la Iglesia deben ser una profecía de la polifonía de la fe para todos los pueblos. El caminar juntos, la sinodalidad, se logra sólo cuando tenemos el coraje de acoger entre nosotros las diferencias“.
Alimentados con el pan eucarístico, luego de una breve pausa los frailes regresaron a la bella y ornamentada iglesia del Colegio, donde cantaron al unísono el himno Veni Creator Spiritus, y el Ministro General rogó al Señor para que “el 86º Capítulo General porte fruto según el plan de Dios”, conscientes de que “si el Señor no construye la casa, en vano se afanan los constructores“.
Con esta oración y como verdaderos hermanos peregrinos del amor, los capitulares, encabezados por el Ministro General, dejaron la Capilla en procesión hacia el aula magna, lugar donde a partir de hoy se desarrollarán las principales sesiones del Capítulo. Algunos símbolos de nuestra fe (velas, cruz, incienso y libro del Evangelio) acompañaron este momento de procesión y del recitado de las letanías de los Santos. Al entrar en el aula magna, el Ministro General declaró abierto el Capítulo General 2024.
Unos minutos más tarde, ya entrada la mañana, el Ministro General invitó al cardenal Raniero Cantalamessa a pronunciar una conferencia, tal como estaba previsto. El Predicador subrayó la centralidad de Cristo para nuestra vida: “Cristo ayer, hoy y siempre“. Adjuntamos su texto completo.